Prewett’s puede rastrear su herencia hasta 1936, con una receta de torta de jengibre que Frederick Shaw pensó que era demasiado buena como para quedársela para él solo.
Fundó Shaw’s Biscuits para vender a nivelo local en el noreste. Durante la siguiente década estalló el conflicto bélico y la empresa encontró su lugar ayudando a la Cruz Roja con el envío de paquetes de comida al frente.
Cuando llegó la paz se empezó la distribución a nivel nacional y la empresa empezó a trabajar con minorista con productos propios y estableció su fábrica.
Mucho ha cambiado en los 75 años desde que el señor Shaw fundó su negocio, ya que la planta hoy en día abarca casi 3000 metros cuadrados y emplea a cerca de 200 personas. Pero hay cosas que sin duda reconocería, nuestras deliciosas galletas y nuestra pasión por compartirlas con todo el país.
Pero la marca Prewett’s tiene su origen mucho antes, en 1872, cuando el molino de harina de William Prewett comenzó a hacerse famoso por sus fantásticos productos.